Emprendedor, activa y cuida tu mente

Detrás de un negocio con éxito encontramos mentes flexibles que reaccionan con rapidez ante imprevistos. La capacidad de innovación, la identificación de problemas a tiempo o el desarrollo de soluciones, son habilidades que pueden mejorar si se cuida la reserva cognitiva.

Nuestro cerebro envejece, al igual que el resto del cuerpo, sin embargo a veces no se le presta la suficiente atención a su estado de salud. Así como practicamos deporte para cuidar la salud física, sería conveniente destinar tiempo a actividades que ralenticen el deterioro cognitivo.

La mente y el cuerpo no están separados, sino conectados dentro del cerebro y juegan un papel muy importante en la generación de procesos mentales. Aunque el cerebro también responde ante la genética, que son los que determinan la base, también lo hace con respecto al entorno, por lo que nuestras interacciones en el día a día influyen, permitiendo cambiar la configuración del cerebro. Nuestro “disco duro” registra información, y facilita la interacción con el entorno. Por ejemplo, un niño nace en India, pero con unos meses de vida lo llevan a España y crece en este país, el niño aprenderá español. El entorno de su familia y lo que le rodea generará unas conexiones específicas.

“Cualquiera puede ser escultor de su cerebro si se lo propone” Santiago Ramón y Cajal

El deterioro cognitivo es un trastorno muy habitual con el trascurso de la edad, que entre otros síntomas está el de pérdidas leves de memoria. El 50% de los pacientes que sufren estas pérdidas de memoria evolucionan hacia el Alzheimer, y el otro 50% no, según Carmen Sarabia (Profesora en el área de enfermería del envejecimiento de la Universidad de Cantabria).

Robert Katzman, profesor de neurociencias de la Universidad de California, descubrió que personas con cerebros grandes y con patología de Alzheimer no habían llegado a desarrollar los problemas funcionales de esta enfermedad, la hipótesis a la que llegó fue que los cerebros de tamaño mayor aguantan mejor los daños de ciertas enfermedades.

También se ha demostrado que cuanto más activa se mantenga la mente, mejor será la reserva cognitiva, que junto con la plasticidad cerebral, son elementos claves para mantener una buena salud cerebral.

Antes de continuar con los consejos para mantener una mente activa, vamos a explicar las diferencias entre la reserva cerebral y la cognitiva.

Reserva cerebral y reserva cognitiva

La reserva cerebral puede definirse como el capital neurobiológico que tiene cada individuo y la capacidad de recuperación y resistencia del cerebro (la plasticidad) ante los daños que pueda sufrir. Si, por ejemplo, una persona tiene más neuronas o más conexiones entre ellas, ante un daño el cerebro resistirá de manera más eficiente. De aquí viene también el hallazgo de que un cerebro más grande tolera mejor los daños.

La reserva cognitiva hace referencia a la capacidad que del cerebro para adaptarse a los cambios, es decir, la eficiencia que desarrolla este órgano por sus acciones y hábitos del día a día. Parece que ciertas actividades diarias hacen que sean más eficientes, ante ciertas tareas su activación será menor que el de otras personas, es decir, les costará menos hacer la tarea o comprenderla. Las acciones que hacemos cada día harán que así sea nuestro cerebro el día de mañana.

Por ejemplo, si una persona ejercita durante toda su vida las capacidades cognitivas y habitúa su sistema nervioso a adaptarse a los cambios, su cerebro usará otros circuitos alternativos cuando alguno se dañe.

Consejos para mejorar la reserva cognitiva

Lectura diaria

Leer es un hábito que nos aporta conocimiento y concentración, es una actividad maravillosa para ejercitar la memoria y desarrollar la imaginación. Puedes hacerlo a través de libros, de artículos o revistas, pero recuerda que la lectura es algo más que ver palabras, es entender su significado, leer con atención plena. También la escritura creativa nos aporta estos beneficios.

Juegos de estrategia

En especial los juegos de mesa, son ideales para divertirse mientras se entrenan habilidades cognitivas. Existen algunos enfocados a la estrategia, como pueden ser el ajedrez, el mahjong, el clásico “Risk”, “Catán”, “Juego de Tronos” o “Carcassonne”. Se estimula el cálculo, la capacidad de reacción y planificación, la lógica y la creatividad.

Aprender cosas nuevas

El aprendizaje estimula el cerebro y favorece la actividad cognitiva. Ya sea aprender un nuevo idioma, tocar un instrumento musical, asistir a conferencias o charlas manteniendo una escucha activa, o aprender a cocinar nuevas recetas.

El doctor Miguel Ángel Martínez-González, autor del libro Salud a ciencia cierta, explica lo siguiente, «cuanto más ha estudiado una persona o aprendido durante su vida, menos se le nota la pérdida de memoria con la edad.  Incluso en situaciones que llevan a la demencia (alzhéimer u otras formas de demencia), ante las mismas lesiones en el tejido cerebral que otra persona, quien ha estudiado más y ha trabajado más con sus neuronas tendrá menos síntomas».

Es más que aconsejable practicar actividades que requieran esfuerzo, los sudokus, los puzles o los crucigramas están bien, pero sería recomendable estimular al cerebro con otros ejercicios metales. Más MOOC y menos sudokus, los MOOC (massive open online course) son cursos en línea masivos y abiertos, donde puedes aprender desde un idioma hasta física cuántica.

Las relaciones sociales

Relacionarse con otras personas puede constituir un enriquecimiento intelectual. Y si además se mantienen conversaciones estimulantes e inspiradoras se nutre más la mente.

Cambiar las rutinas

Si abres la puerta a la novedad descubrirás cosas frescas. Aunque sean pequeños cambios, como modificar la ruta de volver a casa, cepillarse los dientes con la otra mano o reorganizar de otra manera el almacenaje en casa, son ejemplos que contribuyen a la creación de nuevas conexiones neuronales.

Desarrolla un conocimiento profundo

Profundizar en cualquier temática pule el intelecto y mejora las capacidades cognitivas. No consiste tanto en absorber información sino en alcanzar la verdadera sabiduría.

Cuestionar y buscar respuestas

Ser una persona curiosa es importante para la estimulación mental. Hacernos preguntas constantemente consigue que traspasemos las fronteras de nuestra mente.

Te animamos a seguir estos consejos para estimular y mantener la mente activa, y retrasar así el deterioro cognitivo. Si te ha resultado útil no dudes en compartirlo en tus redes sociales.

Portal del Emprendedor de Fraternidad-Muprespa