Errores de posicionamiento en Google que te penalizan

Crear una página web puede ser fácil, pero posicionarla en el buscador de Google requiere de un trabajo constante desde el comienzo de su creación. Para que tengas una web optimizada y bien posicionada, en este artículo os vamos a contar los errores de posicionamiento y las prácticas que han de evitarse y cómo solucionarlo.

El posicionamiento SEO en el buscador de Google es vital para tu negocio. ¿Cuántas veces has recurrido a la segunda o tercera página de Google en tus búsquedas? Seguramente muy pocas veces. Estar en la primera página sin pagar publicidad es trabajo SEO (Search Engine Optimization, Optimización para Motores de Búsqueda), un conjunto de técnicas que se aplican en las webs o blogs, cuyo objetivo es conseguir reputación y un buen escalafón entre tu competencia.

En SEO es tan importante conocer las técnicas para posicionar como los errores a evitar. Google premia pero también penaliza. Si trabajas bien el SEO, Google posicionará tu página entre los primeros, pero si cometes errores te castigará por haber hecho algo que no debes según sus algoritmos, que son los que marcan las reglas.

En nuestro artículo “Qué es SEO y cómo funciona el posicionamiento orgánico” explicamos cómo aparecer en las primeras páginas, y a continuación damos las claves para evitar ser penalizado. Con toda esta información ya tendrás tu sitio web a punto, analizado y con los errores detectados para no incurrir en ellos y empezar a optimizarlo correctamente.

Ojo al contenido de la web

Thin content y contenido de poco valor

Hace referencia al contenido que está por debajo de las 300 palabras. Un contenido así no posiciona bien, y no es que lo diga Google, sino que esto provoca mayor porcentaje de rebote y poca permanencia en la página, y esto si perjudica.

Lo que Google recomienda es que ofrezcas un contenido rico y que aporte valor al usuario. Analiza si puedes mejorar el texto de esa página, siendo más extenso y con más valor. Cada vez que escribas recuerda ofrecer siempre lo mejor para la intención de búsqueda, sin olvidar al usuario final y lo que él espera encontrar en tu contenido.

Si lo que cuentas en tu web o en tu blog no gusta al usuario el tráfico disminuirá, no habrá comentarios, no compartirán en sus redes sociales el contenido y no generará interacción.

Contenido duplicado

Este punto puede afectar tanto si se duplica contenido de otras páginas como si otros copian tu contenido y lo publican. Google lo persigue bastante por lo que es algo que se debe evitar. Es lo que se conoce como duplicado externo.

Si quieres comprobar si alguien te ha plagiado te aconsejamos la herramienta Copyscape, se introduce la URL que quieres analizar y te informará del contenido plagiado.

También hay que vigilar el propio duplicado dentro de la web, conocido como duplicado interno. Pensarás que nunca repites textos en varias páginas, pero en la mayoría de los blogs se repite el primer párrafo antes de entrar al artículo. Google puede interpretar que es mejor no mostrar todo porque está repetido y reducir la visibilidad de la web.

Para conocer el duplicado interno de tu página puedes utilizar la herramienta Siteliner y mejorarlo en función del resultado.

Sobreutilización de palabras clave

Lo que se conoce como Keyword Stuffiing no está bien visto para Google porque presiente que la manera en la que se ha escrito el texto no es muy orgánica.

Nuestro consejo es que escribas de manera natural, usando la keyword (palabra clave) en los lugares más estratégicos pero sin repetirla mucho. Si quieres conocer como de repetidas pueden estar en tu web utiliza la herramienta gratuita Keyword Density Checker. La densidad óptima suele ser entre el 1% y 2%.

Keywords incorrectas

Cuando nos enfrentamos a un texto que queremos optimizar es importante escoger bien la keyword. Es importante hacer un análisis previo sobre las palabras que posicionan mejor, no dejarlo a la intuición o a lo que creemos que es más buscado. Así mismo se debe tener cuidado en no caer en palabras genéricas. Si tu proyecto está empezando es mejor que trabajes con palabras específicas. Posicionarás mejor la web en menos tiempo ya que hay menos gente compitiendo.

Hay muchas herramientas que te permiten analizar la mejor keyword, de entre las gratuitas puedes utilizar Ubersuggest.

Canibalización

Otra de las peculiaridades que tiene trabajar la palabra clave es que si trabajas la misma en varias URLs, estás compitiendo contigo mismo, es lo que se llama penalización por canibalización.

Vamos a poner un ejemplo para que se entienda mejor. Por ejemplo, si quieres trabajar con la intención de búsqueda y keyword long tail “sostenibilidad en el medio agrario”, creando una entrada para hablar sobre esta temática, pero ya tienes otra entrada con la misma o similar, por ejemplo “sostenibilidad en el medio agrícola”, las dos responden ante la misma intención de búsqueda confundiendo a Google, si esto sucede pierdes competitividad y buenas posiciones. 

Para descubrir si tu página web sufre de canibalización puedes utilizar la herramienta Sistrix. Si encuentras alguna repetida intenta agrupar ambas en una misma URL y desindexa la otra.

La importancia de los enlaces

Enlaces entrantes tóxicos

Google tiene un algoritmo, llamado Penguin, con el que rastrea las conductas ilícitas en el contenido de una web, principalmente las malas prácticas de spam y los enlaces poco naturales.

Un enlace entrante tóxico es aquel que proviene de un dominio penalizado y apunta hacia la web (backlinks), su procedencia es dudosa o de mala calidad. Muchos proceden de países como Rusia, India o China.

Otro tipo de enlaces tóxicos también son aquellos considerados como backlink stuffing, muchos enlaces a un mismo dominio en el mismo contenido. También las páginas que abusan de anchor text de palabra clave (el texto utilizado como enlace), cayendo en la sobreoptimiación de keywords. 

Herramientas de pago como Ahrefs o Semrush y otras gratuitas como Google Search Console, pueden ayudarte a identificar este tipo de enlaces. Una vez encontrados puedes eliminarlos, o de forma manual contactando con cada webmaster que te ha enlazado de manera nociva, o utilizando la herramienta Google Disavow Link Tool, que elimina de manera definitiva los enlaces que apunten a tu web, esta opción no es tan recomendada porque puede eliminar también los enlaces buenos.

Poco enlazado interno

Es muy positivo para optimizar la web generar enlazado interno, es decir, trasladar autoridad de una página a otra, ya que favorece el rastreo de Google.

Con Google Search Console puedes analizar el enlazado interno y ver cuáles son las URLs más o menos enlazadas.

No arreglar los enlaces salientes rotos

Este tipo de enlaces son aquellos que has incorporado a tu web, pero el contenido ha podido desaparecer o han cambiado la URL. La existencia de enlaces rotos provoca que Google pierda tiempo en rastrearlos, lo que supone un gasto de sus recursos. En consecuencia existe el riesgo de que desindexe algunas URLs.

Otro motivo por el cual este tipo de enlaces no benefician es que para el usuario resulta molesto que la página enlazada no le proporcione la información que detalla, mostrando una falta de optimización por parte del creador del contenido o de la web.

Si tu página está creada con Wordpress existe un plugin que directamente los identifica. Si no es el caso, puedes utilizar herramientas gratuitas como Broken Link Check.

Ausencia de etiquetas importantes

Hay ciertas etiquetas en las que sí o sí la keyword debería estar. Una de ellas es en el Title, que indica a Google el título principal de esa URL. Y la otra es en el H1, el título principal de la página en cuestión.

 A parte de estas dos hay otras etiquetas recomendables como el h2 (segundo título), h3 (subtítulos), incluir la etiqueta ALT en las imágenes, etc. Es una manera de que Google entienda el contenido y le resulte fácil escanearlo.

Indexación de URLs

URLs indexadas o no por error

Las páginas que no tienen un contenido relevante, que tengan contenido plagiado, o sea el mismo que otra página interna, no deberían indexarse en Google. Algunos ejemplos serían la página de política de privacidad o la de cookies.

Para evitar que Google haga sobresfuerzos lo recomendable es indexar solo aquellas páginas que respondan a intenciones de búsqueda concretas.

Para eliminarlas resulta muy fácil si usas Wordpress, porque existen plugins que permiten indexar o no cada página. Si no es el caso, habrá que añadirlo con código a mano.

De la misma manera puede darse el caso contrario, tener páginas relevantes que no estén indexadas. Si esto sucede será difícil que posiciones tu contenido.

Para comprobar qué páginas están indexadas o no en tu web puedes escribir en la barra de Google “site:tudominio.com” sustituyendo “tudominio.com” por el nombre de la página en cuestión. El resultado que aparece son todas las páginas indexadas de esa web.

URLs en tus redes sociales

Si dentro de tu estrategia se encuentra el uso de redes sociales es importante optimizar las URLs que aparecen en ellas, posicionarás mejor el contenido y conseguirás mayor tráfico a la web.

Esto se puede mejorar revisando que aparece la imagen principal al compartir una URL y que el título y la descripción se ven correctamente.

Otros errores de posicionamiento

No tener https

Es importante que tu dominio tenga la versión segura de la URL (SSL). Google lo recomienda y generas confianza entre los usuarios. Si tu dominio tiene delante el código “https” en lugar de “http” entonces es una web segura. Si no lo tiene se puede habilitar desde el hosting instalando un certificado de seguridad.

Carga lenta de la web

Si la web carga muy lenta el usuario saldrá rápido de la misma, fomentado el rebote y baja permanencia. Se aconseja medir la velocidad de carga y revisar las mejoras que puedes hacer. A través de la herramienta gratuita GTMetrix puedes analizar estos parámetros. Lo ideal es que no cargue en más de 2 segundos y consigas notas cercanas a A y B.

Los problemas más comunes que pueden afectar a la carga son las imágenes no optimizadas (grandes y pesadas), uso de muchos plugins en el caso de Wordpress (no tener más de 10 o 15), los pop ups o elementos de Javascript, páginas muy grandes o un hosting lento, entre otros.

Web no responsive

Es importante que el contenido en el móvil o tableta también se adapte correctamente. Problemas como un texto muy pequeño, un botón que casi no se puede cliquear o un texto que se corta, pueden ser algunos ejemplos de web no responsive. Esto puede resultar muy negativo para el usuario que entra en tu web desde otros dispositivos, por lo que se recomienda analizarlo con herramientas como Responsive Design Checker, que simula como se vería y realizar en el caso que sean necesario los ajustes pertinentes.

Uso de URLs no amigables

Un error puede ser la no optimización de las direcciones de portal, con un uso intensivo de URLs no amigables. Se trata de direcciones web que están formadas por variables y números que no utilizaríamos en un lenguaje coloquial y son difíciles de recordar en caso de compartir la dirección con otro usuario. Lo contrario sería una URL amigable (también denominada semántica), que será fácil de memorizar, de lectura sencilla y entendida por todos. Lo ideal es que en ellas estén incluidas algunas de las palabras clave del contenido al que dirigen. Tampoco es recomendable utilizar signos como guiones bajos dentro de las URLs “_”, mejor usa un guion normal “-“.

No optimizar el CTR

CTR significa Click Through Rate, el ratio de clics por impresiones en tus resultados de búsqueda. Este ratio es uno de los objetivos a mejorar siempre entre tus estrategias. Existen errores que provocan un CTR bajo, como por ejemplo, títulos demasiado largos o que se cortan en Google, no usar keywords, títulos muy comerciales o poco valiosos o meta descripciones sin valor, entre otros.

Si trabajas con Wordpress con el plugin SEO Yoast puedes editar el título y la meta descripción, además de beneficiarte de otros consejos para un copywriting orientado al SEO y muchas acciones aplicables para destacar tu contenido. Con Google SERP Simulator puedes optimizar los títulos y conseguir un tamaño óptimo.

Estos son ejemplos de errores más comunes de posicionamiento que se deben evitar. No te preocupes si tu web tiene varios de los mencionados, lo importante es identificarlos y resolverlos poco a poco.

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